Saberes locales y gobernanza ambiental: una salida a los conflictos socioambientales

Resumen (es)

Colombia es un país pluriétnico y pluricultural (Mineducación, s.f.), lo que hace que esa nación sea rica en conocimientos ancestrales y prácticas culturales. Estos elementos han contribuido a lograr una cosmovisión que trasciende los valores que el capitalismo acelerado ha intentado forjar desde que se impuso la industrialización, gracias a una razón instrumental que solo apostó por la transformación de los recursos naturales para incrementar los beneficios económicos de unos pocos.

Entiéndase como saberes locales los conocimientos, tradiciones, prácticas, la transmisión oral y toda la herencia que aún existen en las comunidades étnicas y afrodescendientes, las cuales a menudo se apartan de la visión occidental que se ha construido sobre el mundo (Oraloteca, s.f.). También hay un saber propio de las comunidades campesinas que guardan una relación especial con la tierra y, pese a que su economía depende de ella, saben tratarla y darle el debido descanso que es propio de todos los seres vivos. Podría refutarse lo anterior argumentando que la tierra no es un ente vivo; no obstante, de ella depende en gran parte la vida de todos los seres vivientes y, por ende, su constitución y conformación demandan un trato especial.